jueves, 5 de enero de 2012

Otros regalos (y III): La Antigua, 'retro' para todos fuera del mercado chino


Eusebio muestra una colección de
soldaditos españoles y un recortable

Eusebio Alvarez-Ossorio siempre recordaba los juguetes que tanto a él como a sus hermanos les regalaba su padre, fabricados por él mismo. Por eso, cuando las circunstancias lo emplazaron a emprender una nueva aventura decidió montar un taller de juguetería y vender creaciones propias con diseño antiguo.
La localización, sorprendente, de varios proveedores y fabricantes que trabajaban el mismo sector le hizo girar, aunque levemente, la idea. Así surgió La Antigua, una pequeña (10m2) y encantadora tienda en la Plaza del Pan en la que se encuentran todo tipo de réplicas de juegos y juguetes de los de antes.
“Cambié el concepto original. Dejé de lado el plantemaiento de taller y vendemos juguetes ya fabricados y otros artículos, pero siempre con la idea retro que pretendía La Antigua”, afirma Eusebio.
Los juguetes suponen el 80% de la oferta de la tienda, aunque la estrella en los tres años que lleva abierta es un Belén réplica de uno del escultor murciano Francisco Salzillo, ya que desde febrero de 2009 (fecha de apertura de la tienda) se han vendido 115, a la nada despreciable suma de 360 euros cada uno.
Escribanías, mapas de navegación, azulejos...
En cuanto a la oferta de La Antigua en general, lo más barato (3€) son unos muñecos con el aire de los famosos Click, pero de cuerda. “Tengo toreros, toros y guardias civiles. Si les das cuerda desfilan”. Lo más caro que llegó a tener fue, hace ya algún tiempo, un grabado que estaba en 600.
Destacan sobremanera los autómatas –juguetes con movimiento– como una espectacular noria (270€) que se puede ver en el escaparate y que forma parte de una colección con la que se montaría una calle del infierno: Tiovivo, barcas, carreras de caballos, tobogán, pista de esquí… Todos superan los 150€ y rozan los 300.
Juegos réplica de antiguos (barajas de cartas, perinolas, peonzas, tabas, cartas de tarot… entre 8 y 25 euros), cajas de música (la típica de la bailarina, otra con un barbapapá, y otras que no son de almacenaje, como pequeños carruseles o algunas con muñecos, a varios precios), juegos de mesa (oca, parchís, serpientes y escaleras… en torno a 25€).
Carrusel y caja musical, barajas,
juego de tabas...
Por otra parte, también encontramos en La Antigua cuadros, grabados y diversos artículos de decoración –desde ángeles hasta escribanías– en chapa, bronce, porcelana y cerámica.
“Me encantan las escribanías y son artículos que gustan a la gente y poco habituales en las tiendas en Sevilla”, razona Eusebio.
Por último, sobre el perfil de los clientes habituales, curiosamente –por aquello del retro– no los agrupa por edad: “Los hay mayores que recuerdan sus años de juventud, maduros que regalan a sus padres y jóvenes que les gusta la línea y el concepto de la tienda. Sí suelen ser de un nivel económico y cultural medio-alto y un gusto muy determinado. Los artículos de La Antigua no son caros, pero tampoco baratos… Eso sí, se salen del mercado chino de los regalos”.

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